Como siempre, dando a entender lo que no es

Comentaba esta tarde Juanmari que él se había metido en la trinchera. Exactamente no es así, porque a continuación explicaba que «…no tengo ya ninguna empatía por el sufrimiento ajeno en esto del procés, demasiada mentira, fingimiento y ninguna empatía de vuelta«. No es una sensación única e individual y no es de extrañar, porque uno lee cualquier noticia al azar y obtiene lo de siempre: la manipulación, la tergiversación, dar a entender lo que no es o, directamente, la ignorancia.

Leamos la tontería del día. Así, al azar, he clicado una noticia en Nació Digital, con el título: «El parlament suís avisa que no s’extradirà Rovira per «motius polítics»«. Reconozco que soy un ignorante de la legislación suiza, pero que sea un Parlamento el que examine una extradición y adelante que no extraditará por «motivos políticos» (algo tan «novedoso» e «innovador» que lo incluyen legislaciones como la española; cómo os quedáis, ¿eh, eh?) me llama irresistiblemente al clic. Más que nada porque ¿un Parlamento decidiendo extradiciones? Esto es material para el antiguo blog Cita Falsa.

Os reproduzco toda la noticia, que es corta: «Suïssa rebutjarà l’extradició de la secretària general d’ERC, Marta Rovira, si està motivada per «motius purament polítics», segons ha confirmat el comitè d’Afers Exteriors del Parlament suís, que va examinar el cas en una reunió aquest dimarts. Segons el document publicat després de la trobada dels parlamentaris, ja hi ha un «procés en marxa» per la petició d’extradició a Espanya de Rovira.

«El comitè d’Afers Exteriors ha examinat el cas de l’independentista catalana Marta Rovira, que ha trobat refugi a Suïssa després del seu processament per rebel·lió i sedició a Espanya, per uns delictes pels quals s’arrisca a 30 anys de presó», assegura el document, que indica que el comitè «ha pres nota» de l’inici del procediment i del fet que «una extradició serà rebutjada si es confirma que la petició està motivada per motius purament polítics».

De fet, el govern suís ja havia indicat en anteriors ocasions que sempre rebutja totes les peticions d’extradició motivades per causes polítiques.«

Venga: directo, duro y a la cabeza. ¿Sabéis cuál es el documento al que se refiere Nació Digital y que extrañamente no enlaza? ¿Por qué será que no lo enlazan Elmon, Ara, ElNacional o Vilaweb?

Porque estaremos de acuerdo en que las menciones al «document publicat» dan a entender algo de cierta enjundia, ¿no? De mayor o menor extensión y con una argumentación más o menos elaborada, pero será algo dotado de empaque, ¿verdad?

Verdad que no, claro. Porque el «documento publicado» es… ¡¡¡una nota de prensa!!! En la que, por cierto, se incluyen unos cuantos temas más aparte del asunto Rovira. Todo lo que dice el «documento» es:

«Enfin, la CPE-N a examiné le cas de l’indépendantiste catalane Marta Rovira, qui a trouvé refuge en Suisse à la suite de son inculpation pour rébellion et sédition en Espagne, des délits pour lesquels elle risque jusqu’à 30 ans de prison. La Commission a pris acte du fait qu’il s’agit d’une procédure en cours et qu’une extradition serait exclue s’il s’avérait que les poursuites étaient motivées par des considérations purement politiques.«

Aaahhhh, que en una Comisión han hablado del asunto… Qué novedad. Impresionante. Parece -en realidad, es- que lo que ha pasado en Suiza ha sido lo que informaba esta otra noticia: «La diputada Sibel Arslan quiere saber cómo procederá el Gobierno suizo en caso de recibir una solicitud de extradición de España. Con ese fin, la representante de los Verdes quiere que el caso Rovira se trate en la reunión que tiene prevista para esta semana la Comisión de Política ExteriorEnlace externo (CPE) de la que es miembro.»

CONCLUSIÓN. Estrictamente, nuestros digitales favoritos no han mentido. Estrictamente, nuestros digitales favoritos han dado a entender lo que no es: que el Parlamento suizo está examinando la extradición de Marta Rovira y que ya adelanta que como sea por motivos políticos, que no extradita. Lo que se suele llamar tergiversar, distorsionar o manipular. Si esto es con lo que convivimos cada día, por supuesto que al final uno opta por ignorar lo que escucha desde el secesionismo subvencionado: siempre está distorsionado, tergiversado o manipulado. No es trinchera, es autoprotección.

¡Ah!, si alguien conoce el «documento» que no enlazan nuestros digitales favoritos, adelante y que lo enlace. Ansioso estoy.

¡Ah!, una información que viene al caso sobre quién decide la extradición:

«La Oficina Federal de Justicia decide sobre la extradición (art. 55, pár. 1, de la Ley federal
suiza sobre la asistencia judicial internacional en materia penal).
Sobre el carácter político de la infracción decide el Tribunal Penal Federal (art. 55, pár. 2, de la Ley federal suiza sobre la asistencia judicial internacional en materia penal).»

Sí, ya sé que a los que no sois lectores de urgencia del blog esta información os sobra porque la dais por cierta (cosa que os agradezco), pero como me he embalado, acabo con un enlace a la Loi fédérale sur l’entraide internationale en matière pénale:

 Section 5 Décision d’extradition

 Art. 55 Autorités compétentes

1 Après avoir accordé un délai convenable pour se déterminer à la personne poursuivie et au tiers qui s’oppose à la remise des objets et valeurs saisis, l’office fédéral statue sur l’extradition ainsi que sur la remise.1

2 Si la personne poursuivie prétend l’être pour un délit politique ou si l’instruction laisse apparaître des raisons sérieuses de croire que l’acte revêt un caractère politique, la décision incombe à la cour des plaintes du Tribunal pénal fédéral.2 L’office fédéral envoie le dossier au tribunal avec sa proposition. La personne poursuivie a la possibilité de se prononcer.»

Pues nada, ya sabéis: quien decide ahora es la Comisión de Política Exterior suiza. Palabrita de digital desinformante.

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Desde Berlin

Bueno, es lo de siempre, en la línea de los catalanes quieren la independencia y Puigdemont ha ganado las elecciones. Tergirvesar, manipular y medias verdades. Por cierto, tengo el honor de tener a Puigdemont de vecino en mi barrio.

Fco. Javier

De entrada, gracias Javier y a todos/as las participantes.

Creo que en este blog se ha podido acotar que la evidente ausencia de autocrítica por parte del separatismo puede obedecer a un sistema de autodefensa para evitar una frustración.
Cuando nos enfrentamos a un derrumbe de nuestros deseos, un discurso que alimente esa ilusión (perdida), es reconfortante y asegura la esperanza mientras que una aceptación de la realidad genera angustia (y cabreo).

Vivo en Vila Olímpica, muy cerquita de Torre Mapfre, donde se halla el consulado alemán, y el día que se detuvo a Puigdemont veía pasar seguidores/as separatistas rabiosos.
Una reacción así está asociada a sentimientos. Difícilmente podemos razonar con alguien que quiere o prefiere creer otra cosa, ya que sólo le interesa lo que quiere siente (a veces conviene que se de un baño de realidad).

Podríamos pensar que los intereses y medios afines que rodean al separatismo, como toda endogamia de ideas, pueden estar impregnados de esa necesidad de ver la realidad como les gustaría que fuera y no como es, y narran e interpretan las noticias a través de ése filtro… Pero NO es así..

A veces al contrastar la noticia (vuelvo a repetir mi agradecimiento a Javier y colaboradores/as por vuestra labor) queda claro que la realidad es otra y que ha habido un proceso de censura y manipulación CONSCIENTE, es decir que alguien ha interpretado la noticia COMO ES y se ha preocupado en manipular esa noticia para que se ajuste fácilmente a una interpretación interesada según sus deseos.
Y esto respecto a la máquina de propaganda… si añadimos que muchos políticos y refrentes separatistas (conscientes de esa manipulación interesada) se envuelvan en ése discurso (o postverdad) para justificar su inocencia o la de terceros es lo que hace tóxico al separatismo.

Joan

Me ha encantado, Javier, eso del «antiguo blog Cita Falsa» 🙂
Se ve que no has perdido el tacto cirujano y vuelves momentáneamente por tus fueros.
Aunque, y creo que en eso coincidimos todos los asiduos del blog, ha sido más que oportuna la transformación de «cita falsa» (por saturación de la realidad) en algo así como: «intento de racionalización, mediante el análisis crítico-jurídico-filosófico, de situaciones y hechos crecientemente insólitos y extravagantes».

Quirze de Montpalau

Curiositats de la vida.

Resulta que els separatistes es pasen mitja vida despotricant de la manca de separació de poders a l’estat espanyol i, tal com ens expliques en el post, ara es feliciten de que el parlament i el govern suís prenguin decisions estrictament judicials.

«Consejos vendo…»

mistermaguf

Puse este comentario en una entrada anterior, pero como Javier me sugiere que lo traiga aquí, lo hago. En realidad era una contestación a un comentario de Candice, en el que repite el mantra del diálogo. Pero como la temática es más o menos la misma, sigue, por suerte viniendo a cuento.

“¡Entonces reaccionar de manera política, por dios! ¡Diálogo!” dice Candice.

Frase que se repite como un meme entre los separatistas. Sin embargo, cuando les preguntas sobre qué quieren dialogar, la respuesta suele ser el silencio.

Notable, ¿verdad? ¿Porqué razón alguien que pide diálogo se hace el sueco en cuanto le pides que lo inicie? Porque sabe que sus planteos sólo caben como imposiciones. Como diálogo son inviables, y en el fondo lo saben.

Y además, cómo es posible que alguien que ignora sistemáticamente al otro puede exigirle diálogo? Los separatistas se denominan a sí mismo “los catalanes”; cualquiera que no sea separatista no es catalán. Es una retórica tribal de antropología básica (hay muchos autores que refieren repetidos casos de tribus que se autodenominaban “los hombres”, en contraposición a otras tribus, que de esta manera quedaban relegados a una condición animal.

Para dialogar se necesitan unas categorías y unos parámetros comunes como punto de partida. No puedes dialogar sobre políticas reproductivas con alguien que sostiene que el ser humano es ovíparo; hay allí una inviabilidad de partida.

En el caso del diálogo político sólo puede tratar sobre el orden administrativo y legal del estado -y todas sus derivadas, entre ellas las económicas y las culturales-, un estado cuya concepción y definición moderna es jurídica.
El independentismo está sustentado sobre una cosmovisión romántica y premoderna de estado, en donde la definción del mismo no es jurídica, sino atávica: los ciudadanos pertenecen o no al mismo por derechos de sangre, no por un contrato social. Se pertenece o no se pertenece según lo que se crea-sienta identitariamente (y la identidad, en esta concepción, es un efluvio telúrico que te impregna, no es una condición que tu eliges.) Y si reniegas de ella, eres un traidor.
Y como la identidad emana del territorio, pues mal vamos, porque si territorializas una ideología tienes, pues… lo que vemos hoy en Cataluña. Es una forma contemporánea de pensamiento mágico-religioso, con todos los elementos clásicos de las teocracias.
En otras palabras, un ser humano ovíparo. No hay manera de argumentar ni razonar con una teocracia.
El creyente de una teocracia cree sinceramente que su creencia y su causa es intrínsecamente justa, incluso si necesita ciertas dosis de violencia para implantarse, porque la causa está en un plano muy superior a estos detalles. No puede concebir que su creencia no es la única verdad, y por eso solo puede ignorar al que no cree: el no creyente no puede existir. Por eso no entiende que se le acuse de violencia cuando quiere conculcar los derechos de los demás, en su concepción la idea de que los infieles tienen derechos equivalentes es algo muy poco claro.

En todo caso caben destacar dos actitudes. La primera es la del cínico profesional (habitualmente el político) que sabe perfectamente que no hay diálogo posible, y aún así insiste por pura estrategia política para la galería; y la del creyente, que sí cree que hay un diálogo que le están negando, porque no es consciente de que lo que está defendiendo es la condición de ovíparo del ser humano -y esto es por pura y dura incultura-.

Para no extenderme demasiado, ¿tú serías capaz de expresar de modo claro sobre qué quieren dialogar los separatistas?

Muchas gracias.

Juanmari

Este artículo de Manuel Arias Maldonado viene que ni al pelo a la entrada, no a la acostumbrada desinformación procesista sino al principio. https://amp.elmundo.es/opinion/2018/04/20/5ad89315ca4741fa5b8b45b3.html?__twitter_impression=true
Sí que empatizo con el sufrimiento procesista ajeno porque no me es ajeno, es decir ya me importa un pimiento el procesismo y sus cuitas pero me identifico con los no procesistas cuyas preferencias han sido sistemáticamente ignoradas salvo para usarlas como moneda de cambio para contentar y calmar a quien mete más ruido y monta más follón. Otro motivo para esta ligera sociopatía sectorial son las trolas, constantes y resistentes a cualquier refutación, que se extienden incluso hasta instrumentalizar el dolor y los temores que realmente sí puedan existir, por ejemplo, hay cientos de procesistas llorando constantemente por Puigdemont, los exiliados y encarcelados, miles de niños preguntando por ellos, genocidios culturales, miedo al fusilamiento, etc. Un crescendo que es común a todos los que son incapaces de soportar la frustración y quieren casito (aunque la cursilería, ahora tan común, sí que es un rasgo original, a veces tan exagerada que ya no distingo la parodia de la «realidad»). Es decir, si me dices «quiero votar en un referéndum de independencia», te escucho (escuchaba) pero si me dices «quieren acabar con los catalanes» entiendo que lo que necesitas es una lección, una lección de vida y una lección de democracia, que se imparte igual que a los niños cuando patalean: ignorando sus demandas hasta que se calmen. Aprende a pedir las cosas cómo se debe y aprende a aceptar no obtenerlas. Hablo, no como español que ve la «sagrada unidad de la patria amenazada» sino como vasco que también sufre y padece una hegemonía nacionalista de mentiras y victimismo, fue esa cercanía emocional con los catalanes ignorados la que hizo que me metiera hace años en este procés y la que me mantiene en él. Para finalizar, daros las gracias a todos por vuestra nueva y, supongo, segura contribución a las arcas del gobierno vasco disfrazada de nueva oportunidad a la política.