La Administración de Justicia y el catalán

A raíz de un incidente en Sala que ha salido estos días en la prensa, el Conseller de Justícia, Carles Mundó, ha dicho que, en su opinión, sería necesario que castellano y catalán fuera de conocimiento obligatorio para todos los jueces y profesionales de la Administración de Justicia.

Como de costumbre, en el blog tenemos información para todo. No hace falta cuestionarse lo que dice el Conseller. Voy a darlo por bueno: que sea obligatorio.

En contrapartida, también habrá que dar por buena otra premisa, hoy en día existente, como que un opositor a Juez (o Fiscal, o Letrado de la Admón. Justicia; vamos a centrarlo en lo de Juez) de Cuenca puede tener como destino Santa Coloma de Farners (Girona), de la misma manera que uno de La Bisbal d’Empordà (Girona) puede acabar, no sé, en Aracena (Huelva). Es decir, si el opositor de Cuenca llega a acreditar el conocimiento del catalán, no existiría impedimento alguno en que sirviera en cualquier plaza catalana, siguiendo la opinión de Mundó.

Pues bien, esto tiene un problema que ya expliqué en un artículo del mes de abril (ahora mismo, el blog es como el bolsillo de Doraemon: hay respuesta para casi todo): en Cataluña, aproximadamente, se concentraba el 13,82% de los jueces en activo (742 de 5.366). En cambio, en el acumulado de 20 años de la Escuela de Práctica Judicial, resultaba que, con origen de residencia en Cataluña, el número de Jueces en Prácticas solo había sido el 7,94%.

¿Qué quiere decir esto? Pues algo que todo el mundo sabe: que el número de opositores en Cataluña a Cuerpos como Jueces, Fiscales o Letrados de la Administración de Justicia  (y en general, para cualquier Cuerpo de la Administración de Justicia) es muy inferior al que le corresponde por demografía. Y que, por lo tanto, muchas plazas son cubiertas por opositores procedentes del resto de España.

El resto de conclusiones a extraer de los datos expuestos (que salen de los datos estadísticos del CGPJ, no me los invento), los dejo para el amable lector. No sé, que el Conseller prepare las oposiciones, que gane la plaza, y luego que haga valer sus conocimientos de idiomas para obtener plaza en Vic.

Pero primero que prepare las oposiciones y gane la plaza frente a otros opositores de Cáceres, Madrid, Burgos o Logroño. Interesante competición. A ver quién clava más los codos y estudia de lunes a sábado (algunos, hasta el domingo), mañana y tarde, durante unos cuantos años.

11 Comments
antiguos
nuevos
Inline Feedbacks
View all comments
Juanmari

Yo lo llamo el síndrome del Athletic de Bilbao. Reduce tu área de búsqueda de talento y serás menos competitivo. En Euskadi somos muy aficionados a eso. No en las empresas privadas ni en las buenas universidades afortunadamente. Y la verdad, tampoco en la mayoría de puestos de alto rango de la función pública se lleva muy a rajatabla.

ramses

Lo que quiere el conseller es lo de Juan Palomo. ¡Yo me lo guiso yo me lo como!. Esto de los pluriidiomas es patético y sólo pasa aqui. Según un independentista un tio de Cuenca tiene que saber catalán pora venir a Cataluña. Y no solo eso, le tendrían que enseñar catalán en su escuela de Cuenca, ¿Ustedes se imaginan que en Cataluña te obligaran a aprender eusquera?. Es muy fácil hblar del bilinguismo cuando lo aprendes hasta ahora de manera casi inducida por parte del entorno. Pero a partir de ahora que no se da casí castellano en la escuela, veremos a ver las nuevas generaciones que dominio tienen. Eso si, las clases pudientes a llevar a sus hijos a colegios plurilingues para que dominen los idiomas….

Lo del idioma es «dumping social».

Abraham Benyosef

A mí no me parece irrazonable exigir catalán a los jueces que van a ejercer en Cataluña. No digo que el nivel D pero una muy buena comprensión oral y escrita y la capacidad de expresarse aceptablemente oralmente y por escrito sí que las tendrían que tener. Por supuesto que a alguien que oposita desde el resto de España se le podría dar un período de prueba durante el cual aprendería el idioma, pero no creo que este fuera un obstáculo mayúsculo. Después de todo estamos hablando de gente con instrucción universitaria y posgrados, y de un idioma muy próximo al castellano que por simple exposición ambiental se aprende muy rápido.

El problema es si se va a hacer de esto un arma arrojadiza y si se va a exigir que hagan pruebas en que tienen que distinguir «per» de «per a» o escribir correctamente «aneu-vos-n’hi». No se debería confundir un dominio operativo de la lengua con una fluidez de filólogo.

ramses

¿Pero a alguno le queda alguna duda de que el idioma se está utilizando como una arma arrojadiza de diferenciación y para mantener cerrado el coto para los mismos?. No es una prueba ingente que salvo pequeños episodios como este de Olot (que habría que analizar en todos sus detalles) no haya practicamente casos de enfrentamientos por el idioma…. Y claro que hay mucha gente que hace esfuerzos y que entiende el catalán, pero de ahí a dominar la lengua por escrito. En el lenguaje jurídico hace falta dominar la propiedad en la utilización de sus términos y eso no se consigue en cuator días, nio en varios años….